La banda trasandina se presentó en nuestro país para celebrar en nuestras tierras el cumpleaños número 30 de su disco Fin de un mundo enfermo. La jornada se veía prometedora, ya que además nos traía la presencia de Dracma, los nacionales serían los encargados de prender la mecha de las velas en la celebración. Y es que ver a A.N.I.M.A.L en vivo siempre es bienvenido, y si a eso le sumamos la celebración del cumpleaños del disco que les abrió las puertas en Chile, la fórmula termina siendo explosiva.

Y llegó el momento de la apertura con los nacionales de Dracma, con duelos vocales y la contundencia de la instrumentación, hicieron que nos remontáramos a esos ya lejanos años 2000. La agrupación nacional se mostró sólida, pulcra y experimentada; los cuales son argumentos suficientes para recordarnos que a estas alturas son una institución hecha en Chile, y una de las bandas más reconocibles y pilares del nu metal nacional. “Verte Morir“, “Como un animal“, entre otras canciones sonaron fuerte en el recinto del Coliseo demostrando que a esta altura ya son himnos entre los feligreses del metal nacional preparándonos para el plato fuerte que se venía.

“Solo por ser indios” comenzó a escucharse por los parlantes, signo inequívoco de que el cumpleaños comenzaba, y la fiesta se desató, Fin de un mundo enfermo es el segundo disco de los argentinos, y que nos entrega 11 contundentes canciones que fueron tocadas en orden, más otras sorpresas todo para el deleite del público nacional, que disfrutó de principio a fin.

A.N.I.M.A.L siempre ha jugado de local, tiene una fanaticada a prueba de todo, por algo quisieron celebrar los 30 años de su segundo disco al otro lado de su país. Desde el primer minuto de la cita, conectaron con su público, que ya había tenido la posibilidad de verlos en marzo del presente año, Andrés Giménez fue el maestro de ceremonias, siempre participativo y muy conectado con los asistentes al show, y si de animar la fiesta se trataba Cristian Lapolla y Marcelo Castro en bajo y batería respectivamente, estaban dispuestos a machacar nuestras cabezas a punta de una aplastadora base rítmica que nos trasladó a 1994.

Fin De Un Mundo Enfermo además de darle el nombre al disco es la tercera canción, y desde el primer riff terminó de demoler el recinto capitalino que a esas alturas pedía más de los argentinos, quienes estaban dispuestos a entregarnos toda su pesada artillería de temas que ya son clásicos y esto siempre es bienvenido.

Pero 11 canciones no fueron suficientes, y las sorpresas en un cumpleaños cargado a la felicidad y emotividad no paraban. Hasta que comenzó la recta final, y ésta necesitaba ser a lo grande; porque bandas como A.N.I.M.A.L hacen que el público disfrute tanto el espectáculo que cabe la gran posibilidad que termines en el mosh, lo que siempre es bueno, y ese final venía de la mano de “Lejos de casa”, “Locopro” y “El nuevo camino del hombre”, entre otros cañonazos que resonaron en nuestros cráneos.

En resumen, la jornada de anoche era lo que necesitábamos, una cita con una de las agrupaciones más grandes de la escena metalera sudamericana, que ha sido parte de nuestra banda sonora por años y que además quisieron invitarnos al cumpleaños de uno de sus discos más queridos, reafirmando así la hermandad metalera que existe a ambos lados de la cordillera.