Mayhemic + Nuclear: Códigos del caos, la tormenta de thrash metal que azotó Santiago

Viernes 1 de Agosto, una lluvia inclemente se cernía sobre la capital, haciendo que las calles estuvieran más vacías de lo habitual, con un frío que apuraba a los pocos transeúntes a llegar a sus destinos. Sin embargo, en el legendario Mibar, una explosión de riffs y solos a velocidad endemoniada, encendían la noche convirtiéndola en una verdadera hoguera de metal.

El evento fue convocado bajo el nombre Códigos del Caos y reunió a quienes probablemente, son en la actualidad los máximos referentes del thrash metal nacional.

Por un lado Mayhemic, joven banda que ha cautivado a las audiencias y prensa especializada con su propuesta old school de un thrash crudo, violento y veloz, que recuerda los primeros pasos de las bandas germanas del estilo como Sodom, Destruction o los inicios de Kreator. Han sido muy bien recibidos por la crítica especializada y se encuentran camino a consolidarse como uno de los principales referentes del metal nacional.

Por otro lado, los consolidadísimos Nuclear, quienes tras su exitoso paso por The Metal Fest 2025, han dedicado la mayoría de sus esfuerzos a la composición de lo que será su próximo álbum de estudio, por lo que esta jornada se convertía en una interesante ocasión de comprobar el estado actual de la banda, además de la promesa de incluir temas no incluidos en sus últimos sets.

La jornada partió a las 21:30, con Mayhemic quienes tras la introducción con “Rising Armageddon”, abrieron las puertas del infierno con la brutal “Kollarbone Crushed Neanderthal”, una explosión de riffs ejecutados a toda velocidad que inmediatamente desataron el headbanging en el público que repletaba el segundo piso del local.

La masacre continuó con “Extinction & Mystery”, de su álbum Toba, el que fue coreado por la asistencia y ocasionó el primer mosh de la noche, los cuales no se detuvieron nunca más.

La propuesta de la banda es arrolladora, con una ejecución técnica impecable, con riffs y más riffs lanzados a toda velocidad, una gran presencia escénica y la versatilidad que les otorga tener dos encargados en las voces. Temas como “Valley of the Tundra” o “Triumph Portrait” fueron un buen ejemplo de ello.

Tras un pequeño problema técnico (rotura de cuerdas) y gracias a la ayuda brindada en ese momento por sus colegas de Nuclear, el show continuó implacable con la instrumental “Escathological Symphony”, una soberbia demostración de los sonidos del thrash metal más primigenio, veloz y violento y que, a muchos de los asistentes, debió recordar los años en que descubrimos, nos sorprendimos y enamoramos de esta música.

El tramo final del show, lo compuso el tema homónimo de su hasta ahora único LP, “Toba”, y las brutales “Beyond Hell” y “Volcanic Blast”, dando un cierre perfecto a una explosiva y furiosa presentación.

Tras una breve pausa aprovechada por el respetable para acercarse a la barra y rehidratarse, sale a escena Nuclear. Con la potencia y calidad de ejecución a la cual nos tienen acostumbrados, abrieron los fuegos con la intensísima “Waging War”, electrificando al público que, desde el primer minuto, entró en comunión con la banda, coreando cada canción y llenando el reducido espacio con un mosh imparable.

Luego de una pequeña y divertida confusión por parte de Matías Leonicio en el título de la canción, el show prosiguió con “God Forsaken Life”, del recordado álbum Ten Broken Codes, una verdadera demostración de potencia musical.

A continuación se revisó lo más reciente de la banda con el clásico instantáneo que es “Violent DNA”, del EP homónimo, una verdadera catarsis de agresión sonora, desatando la euforia en el público asistente.

A lo largo de todo el show la banda ratificó el buen momento por el que está pasando, con una ejecución impecable, un dominio absoluto del escenario y una interacción fluida, cercana y natural con su público. La entusiasta respuesta ante temas más antiguos como “Killing Spree” o “Vindictive”, fue prueba de ello.

Marcando la medianía del set, nos encontramos con “Abusados” un imperdible del último LP de la banda, Murder of Crows, cargado de crítica social, tan vigente desde su debut en 2020 como hoy.

Seguimos con la furia destada de “Confront” y a continuación una breve pausa para recordar la historia de Franco Vargas un joven conscripto fallecido en una marcha militar con muchas irregularidades a principios del año pasado y que es recordado en la tremenda “Not Yet a Man”, muy bien recibida por la audiencia.

Ya en la recta final del show, se desempolvó un viejo track del recordado LP Formula for Anarchy, como lo es “Corporate Corruption”, la brutal versión del clásico de Napalm Death “Siege of Power” (que generó los mosh más brutales de la noche) y el clásico “Belligerence”, del celebrado disco Jehovirus.

Finalmente el cierre llego de la mano de una descomunal versión de “Apátrida” que hizo explotar al público en MIBAR.